La
Columna de Jose (*)
YACUIBA,
BAJO EL AGUA
“…Todos los años, Yacuiba corre el riesgo de
inundarse, con el sistema de drenaje pluvial que empezamos a construir esta
historia se acabará pronto…” así narraba una voz en off una publicidad repetida hasta el
cansancio, hace algunos años atrás. Abril comenzó con una tormenta de
proporciones casi diluvianas, los yacuibeños contemplábamos la lluvia caer
imaginando esos ríos de aguas impetuosas en los que se convierten las calles de
nuestra ciudad, somos una ciudad y seguimos teniendo el mismo problema de 1940
que cuando llueve no se puede ir a ningún lado, lamentablemente una mala
planificación de los recursos económicos durante los años bonanza de la era del
gas, produjeron que sigamos igual, que las cosas sigan mal y que no exista un
drenaje pluvial, sin embargo nuestras autoridades actuales no realicen ningún tipo
de acción de contingencia para una tormenta como la de anoche, porque la verdad
es que nunca estamos preparados para prevenir ningún desastre, se incendia el
mercado y recién decimos necesitamos bomberos, llega la sequía y recién decimos
necesitamos acciones que prevengan tiempos de escasez, a este paso el día que
recién se preocupen de concluir el drenaje pluvial va ser el día que el cerro
se nos caiga encima con un deslave producto de las lluvias damnificando a los
barrios colindantes. En el sitio web de la Contraloría General del Estado, el
12 de junio de 2015 se difundía la noticia que se había presentado denuncia formal
por daño económico de más de 13 millones de bolivianos en proyecto de
construcción de drenaje en Yacuiba contra el ex Ejecutivo Seccional, Marcial
Rengifo Zeballos ya que se habían establecido indicios de responsabilidad penal
por los delitos de conducta antieconómica y apropiación indebida por la
suscripción de contrato y otorgación de anticipo para la ejecución del proyecto
de construcción drenaje pluvial “Yacuiba-Fase I”.
El gran problema del Chaco y de los Chaqueños, es que no
hemos sabido elegir bien a nuestras autoridades, hemos decidido en las urnas
delegar la responsabilidad de cambiar el destino del Chaco en manos de
políticos que sólo supieron cambiar el estilo de sus vidas pero no pensaron
jamás en solucionar las necesidades básicas insatisfechas de su pueblo, ahora
que la plata del gas se hizo gas, ya no podemos lamentarlos, lo que resta por
el bien del Chaco y su destino, es seguir no más, exigir desde los ámbitos de
participación y control social que las autoridades sepan administrar la pobreza
de una manera eficiente, generando así la justicia social, no puede ser posible
que cada vez que llueve Yacuiba se detenga y quede bajo el agua. Porque cuando estemos
dispuestos a avanzar, la lluvia no puede detenernos.
(*) El autor, José Luis Claros López es Comunicador Social y
Escritor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario