Bajar impuestos en Yacuiba, no es buena idea.
Por José Luis Claros López
En determinadas circunstancias existen algunas decisiones
políticas que un Alcalde no debe realizar, más aún cuando se pregonaba durante
ya doce meses que las finanzas del Gobierno Municipal atravesaban por una
crisis, una de las cosas que no se deben hacer es justamente bajar los
impuestos. Y sí, lo sé, más de uno va creer que sólo lo digo para dar la
contra, pero no es así; veamos el escenario: Se dice que hay crisis, se dice
que ya no existe un equilibrio entre lo que se pensaba invertir y lo que se
tiene para invertir, se dice que producto de la crisis y por ausencia del
equilibrio del gasto público en el nivel local ahora existe prácticamente una
suerte de congelamiento del movimiento económico en Yacuiba, es decir que se atraviesa
por un periodo de recesión.
Pues como respuesta para solucionar la crisis, el
Gobierno Municipal de Yacuiba decidió implementar para el pago de los impuestos
de bienes inmuebles y vehículos una serie de descuentos que terminan siendo
asimiladas por la población como una suerte de “bajar impuestos”; que
justamente fue una de las promesas de campaña pregonadas a los cuatro vientos
durante los tiempos cuando se buscaba enamorar al electorado para conseguir
ganar las elecciones de marzo de 2015, definitivamente cumplir con las promesas
es bueno, lo malo es cumplir justamente las promesas que menos impacto tienen y
que no son adecuadas para el momento que se vive. Obviamente, la economía de un
Gobierno Municipal es como la economía de cualquier familia, se debe dar con el
punto adecuado para el equilibrio entre “ingreso” y “gasto”, no se puede gastar
más de lo que se tiene, pero nada detiene la existencia de las demandas de los
diversos sectores, está existencia de demandas muchas de las cuales tienen un
profundo impacto social, generan el desequilibrio pues aunque disminuyen los
ingresos los ciudadanos que vivimos en la jurisdicción municipal exigimos más
inversión; en semejante circunstancia seguramente alguien pensó que
políticamente caería bien cumplir con algunas de las promesas electorales, al
fin y al cabo ya van más de doce meses desde que ganaron las elecciones, pero
ahí está el detalle; cual promesa cumplir. Al final se decidió por el tema de
los impuestos, de acuerdo a la legislación nacional los Municipios tienen como
una de sus fuentes de ingresos, justamente los ingresos propios que se generan
por concepto de pago de impuestos dentro de su jurisdicción. Pero porque digo
que bajar los impuestos sea malo, bueno pues, es que resulta malo cuando vemos
el otro escenario; se disminuyen impuestos locales, pero en el plano nacional
las políticas tributarias que también afectan al contribuyente local se vuelven
más complicadas, de que nos sirve que disminuyan impuestos locales sí los
impuestos nacionales siguen siendo altos, Bolivia es uno de los países con
políticas tributarias muy duras, pero además tenemos el escenario local y es
que acaso valdrá la pena disminuir una fuente de ingreso propio, cuando otras
anteriores fuentes de ingresos también disminuyeron. Porque sí algo es cierto
es que los problemas sectoriales que afectan hoy el mejoramiento de la economía
local, mañana seguirán existiendo justamente porque se generan por una falta de
atención y de la implementación de una estrategia que permita que se den
soluciones y obviamente bajar impuestos en el plano local no es el mejor camino
para salir de la crisis que afecta la economía de los hogares de las familias Yacuibeñas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario