La Columna
de Jose (*)
LOS
PROBLEMAS DE LA AUTONOMÍA REGIONAL EN EL CHACO TARIJEÑO
Semanas atrás se suscitó mediante los medios de
comunicación de Yacuiba, un fuerte cruce verbal protagonizado por el Ejecutivo
Regional del Chaco y el Ejecutivo de Desarrollo de Caraparí ambas autoridades
forman parte del Órgano Ejecutivo Regional establecido en el Estatuto
Autonómico Regional, pero lamentablemente José Quecaña en su calidad de
Ejecutivo Regional Transitorio, pretende tratar a los Ejecutivos de Desarrollo
como si fueran sus peones, pero para él “Caraparí no aporta nada al
funcionamiento del Gobierno Regional”, cuando el Estatuto Regional señala como sus
atribuciones del Ejecutivo Regional: “Dirigir la administración pública
regional, coordinando la acción con los Ejecutivos de Desarrollo” y “Decretar
al inicio de su mandato, de forma obligatoria, la desconcentración administrativa”,
es ahí el origen del problema; no existe
coordinación entre las autoridades que forman parte del órgano ejecutivo,
situación que perjudicará la planificación regional, porque parece que para el
Ejecutivo Regional es mejor olvidar que los Ejecutivos de Desarrollo tienen
como atribución “Dirigir las políticas públicas en su jurisdicción”, el otro
problema es la cuestión de la planificación y distribución de los recursos
financieros en el presupuesto regional.
El Gobierno Regional del Chaco Tarijeño, en el
marco de su autonomía económica financiera, ejerce las facultades de decidir el
uso de sus recursos. Pero, su principal fuente de financiamiento para sus
competencias, son los recursos que provienen del extractivismo, por consiguiente,
toda la burocracia, los planes, programas y proyectos en la Región Autónoma del
Chaco dependen únicamente de los vaivenes del negocio de los hidrocarburos, sin
la plata del gas, no podrá existir Autonomía Regional en el Chaco Tarijeño. Esta
situación revelaría que se construyeron las bases de la autonomía regional, sobre
arena y pronto la construcción va terminar derrumbándose. Desde arriba, las
autoridades del Gobierno Regional en el fondo no desean implementar un
verdadero espacio Regional para el desarrollo de los pueblos del Chaco. Quizás
por esa razón, cada vez suman más voces que piden la renuncia del actual
Ejecutivo Regional Transitorio. En el caso de la renuncia de José Quecaña, la
Ley Nro. 927 determina en su artículo 6to. “En caso de ausencia definitiva de
la Máxima Autoridad Ejecutiva Transitoria del Gobierno Autónomo Regional del
Gran Chaco, lo sustituirá y asumirá sus funciones hasta la conclusión del
respectivo periodo, un Asambleísta Regional conforme el Estatuto Autonómico
Regional del Gran Chaco.” Al paso que vamos, el Ejecutivo Regional Transitorio
debería renunciar, no para dar paso a un período de caos, sino que debería
renunciar por el bien común del pueblo Chaqueño, que a pesar de un escenario
tan adverso todavía tiene la esperanza que mejores días lleguen al Chaco.
(*) El autor, José Luis Claros López es Comunicador
Social y Escritor.
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